La tabla ouija hace regencia a un tablero de origen desconocido, que desde hace muchos años se viene utilizando como herramienta de conexión con los seres de la más allá, un juego que para muchos a resultado en experiencias espantosas de las cuales solo relatan malos momentos a los que nunca quisieran volver a experimentar ni en su recuerdo.
La forma de la tabla ouija se asemeja a un tablero de madera de características similares al juego del escondite, conocido por muchas culturas como aquel en donde se coloca debajo de un atabla con las letras del alfabeto un plato boca abajo para hacer con el mismo contacto directo con los espíritus u almas del mundo exterior.
Aunque mucho se habla acerca de la tabla ouija, como se mencionó anteriormente sus orígenes a ciencia cierta son aún desconocidos e imprecisos, muchas personas dicen haberle utilizado, logrando por medio de su funcionalidad contacto con seres queridos que han muerto, sacando de esta experiencia el logro de objetivos claros de la comunicación directa con los mismos, que de cierta manera les ha servido para que las almas de los que se quiere descansen en paz.
Sin embargo, el otro lado de lado de la moderna del uso de la tabla ouija viene marcado de terror y de experiencias de impactantes, testimonios que aseguran que por medio de dicho juego lo único que han logrado es abrir la puerta a espíritus malignos, demoniacos quienes aprovechan la apertura de la puerta que se abre vía el juego para entrar a este mundo que para ellos es desconocido, perturbando sus mentes y sus vidas.
Muchos aseguran que el juego de la tabla ouija no es más que una creación del demonio, una herramienta que el mal utiliza en manos del ser humano para entrar en el mundo terrenal con el único objeto de meterse en la mente y espíritu de quienes le invocan.